Al más puro estilo ramoniano salieron Obús al escenario, sin apenas mediar palabra y empalmando una canción tras otra, con muchas prisas y pocas pausas. De una tacada, en poco más de una hora tocaron trece temas, rescatando piezas -salvo de "Dejarse la Piel" y "Otra Vez en la Ruta"- de toda su discografía. Abrieron con "Corre Mamón", el tema que inicia su último álbum, siguieron con la endeble "Más que un Dios", y de ahí en adelante se me desordena el set-list, pero no faltaron "Que te Jodan", "Te Visitará la Muerte", "Dinero, Dinero", "Sólo lo Hago en mi Moto", ¡¡cinco cortes de "El Que Más"!!, y dos temas más de su reciente disco. ¡Demasiado para el cuerpo humano, amigo lector!
Satisfecho como estaba, en el momento en que se retiraron, por mí ya podría haber acabado su actuación. Habían sonado tremendos, se habían vaciado por completo, y el repertorio no podía menos que calificarse de impecable.
Pero quedaban los bises... Y fue en ese último tramo cuando la temperatura descendió unos cuantos grados. Empezaron con "Va a Estallar el Obús" (hasta ahí nada que objetar), pero, con motivo de la presentación de los miembros de la banda, la sucesión de solos me dejó algo frío. Y para acabar de estropear las cosas, en el final de fiesta con "Esta Ronda la Paga Obús", Fortu se adueña del gimmick propiedad de Iggy Pop e invita a tomar el escenario a parte del público asistente, quienes se hacen con el micro y todo el protagonismo de la situación (detalle éste que a mí, ni que sea con La Iguana como maestro de ceremonias, me acaba de convencer; no le encuentro la gracia a estos saraos, de verdad).
Por lo demás, un bolo cojonudo. Como se puede comprobar en el video adjunto (grito final en "Autopista"), Fortu sigue conservando su chorro de voz prácticamente intacto, lo que a día de hoy le hace valedor del apodo que le dieron sus compañeros en los '80s: El Garganta.
Pero no sólo hubo demostración vocal por parte de Fortu; el vocalista también ejecutó un número circense que, en esta ocasión, por poco no le cuesta las costillas al voluntario que le ayudó a perpetrarlo. Tras el guarrazo, Fortu le despachó del escenario con la mejor frase de la velada: "¡Castigado! A tomar por culo de aquí". Genio y figura, el muy cabronazo.
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