Las pelis de la semana (#24)

***** Cascarria inmunda
***** Rollete soportable.
***** Tiene sus buenos momentos.
***** ¡Guay!
***** Para escribir en piedra.


Hacía mucho tiempo que no reseñaba mis visionados cinematográficos; lo cual, por otra parte, me ha permitido acumular un buen puñado de títulos. He aquí una selección de los mejores que he visto en las últimas semanas:


New York, New York: la vi por primera vez hace muchos años en un pase televisivo de madrugada, y me gustó. En esta ocasión, sin embargo, no me ha entusiasmado tanto. El personaje de De Niro se hace a ratos insoportable, y no son pocas las escenas en las que su interpretación deja bastante que desear (no sé si el problema es la poca mano de Scorsese en la dirección, un guión estúpido, o que las contínuas improvisaciones de Robert durante todo el rodaje acabaron pasándole factura). La voz de Liza, eso sí, sigue sonando igual de impresionante. ***



After: entre el retrato generacional y el esquema narrativo a tres bandas del clásico nipón "Rashomon", tras el guión de "After" se adivina el amor por la ciencia-ficción de Rafael Cobos, quien ha trufado la historia de unos cuantos guiños al mejor cine fantástico (de "La invasión de los ladrones de cuerpos" a "Blade Runner"). Interesante. ***




El Escritor: tras dormir a pierna suelta en mis dos anteriores visitas a una sala de cine (con la aceptable "Avatar" y la nausebunda "Furia de Titanes", ambas en mareante sistema 3-D), ya era hora de ver una peli como Dios manda en pantalla grande. Y es que Roman Polanski pocas veces decepciona. Con una trama 100% hitchcockiana, "El Escritor" pone en tela de juicio esa gran mentira llamada Política y a sus poco escrupolosos artífices. Vibrante de principio a fin. ****



La Horde: que los zombis están de moda es un hecho; que están a punto de caer en la sobreexplotación, también. Por fortuna, este film francés parte de un punto de partida algo distinto a lo habitual. Descrita como un cruce entre "El amanecer de los muertos" y "La jungla de cristal" (!), el metraje de "La Horde" tiene una primera mitad que te deja sin aliento, para, seguidamente, perder fuelle hasta desincharse por completo. **



Caché: a falta de visionar su más reciente film, "La cinta blanca", y casi sin proponérmelo, tres han sido los títulos del controvertido director austríaco Michael Haneke los que, en cuestión de días, he encadenado. El primero, este sólido y efectivo thriller psicológico (si es que así se puede catalogar "Caché"), que abre muchos interrogantes pero no despeja ninguna incógnita. Inquietante y perturbadora, el espectador es al final quien tiene la última palabra. ***



El Tiempo del Lobo: todavía no he visto la apocalíptica "The Road" con Viggo Mortensen de protagonista, y mis dudas tengo... porque si es tan coñazo como esta versión del Apocalipsis firmada por el amigo Haneke, mejor me abstendré de acercarme a ella. "El Tiempo del Lobo" certifica la concepción de que "el hombre es un lobo para el hombre", lo cual, en manos de otro director hubiese dado pie a un film crudo, violento y salvajemente desalentador; por desgracia, en el título que nos ocupa se lleva a cabo sin garra, sin ritmo, sin tensión. Un completo aburrimiento, vaya. *



71 Fragmentos de una Cronología del Azar: ¿has visto "Elephant" de Gus Van Sant? Si es así, supongo que no fui el único que lo pasó realmente mal viéndola, ¿cierto? Y es que no recuerdo haber salido tan cabreado de una sala de proyección como en aquella ocasión. Madre mía, qué película... Pues bien, este otro título de Michael Haneke (rodado nueve años antes que "Elephant", y, casualmente, con un punto de partida y un desarrollo muy similar) es capaz de poner a prueba la paciencia del espectador tal como haría posteriormente Van Sant con su película inspirada en otra matanza, en su caso la de Columbine. Definitivamente, creo que necesitaré unos cuantos meses para armarme del valor suficiente para ver otra peli de Haneke (de lo contrario, yo mismo perpetraré una masacre aleatoria). *



Yo, También: lo cierto es que tenía mis reservas con esta peli... Y no hay otro culpable que el tratamiento mediático que recibió tras cosechar premios y elogios por todos los festivales a su paso; un tratamiento, centrado exclusivamente en la presencia de su protagonista, que me echó poderosamente para atrás. Y es que, tal como sucediera con el asesinato de Miguel Ángel Blanco y el posterior montanje circense bautizado como Espíritu de Ermua, el uso que hacen las Instituciones y Medios de ciertos temas espinosos -en este caso, la problemática de los afectados por el Síndrome de Down- me parece ciertamente burdo y nauseabundo. Por suerte, vencí mis prejuicios, me aventuré, y no puedo decir que acabase decepcionado. Desgarradora, arriesgada y dura (también escrupulosamente estudiada, por qué no), "Yo, También" apela a la necesidad de amor y sexo de unos y otros. ***



Kick-Ass: lo afirmo tajantemente: siento una especial debilidad por los dibujos de John Romita Jr. Dicho esto, no puedo mostrarme imparcial con los (hasta el momento) ocho números del cómic que ha inspirado esta adaptación cinematográfica. Pero no sólo en el apartado gráfico brilla "Kick-Ass" (el tebeo); el guión de Mark Millar -sin ser la bomba- también luce por sí solo. Es por eso que esperaba más de esta "Kick-Ass. Listo para Machacar" (!). Se ha conservado la violencia del original, también el ritmo trepidante de las escenas de acción, y se han introducido pocos cambios argumentales respecto al guión que la inspira, pero algo falla en esta adaptación. Todavía no sé qué es, pero el resultado final no es ni tan divertido ni tan entretenido. A ver qué tal lo hacen en la segunda parte... **